
Apenas dos semanas antes de su muerte, una hospitalizada Elizabeth Taylor habló con su alguna vez rival Debbie Reynolds.
"Le dije: "Envejecer es realmente una m…."", le contó Reynolds a Access Hollywood de su última conversación con Taylor. "Y ella dijo: " Ciertamente lo es. Ciertamente Debbie. Esto es muy duro "."
"Yo dije, "Bueno, pero te estás cuidando ahora, Elizabeth," recuerda Reynolds. "Y ella dijo: "Estoy tratando."
"Dios la bendiga, ella está en un lugar mejor", dice Reynolds. "Estoy feliz de que ella salga de su dolor porque estaba sufriendo mucho".
En cuanto a su legado, Reynolds reflexiónó sobre la Taylor "productiva y larga carrera” de Taylor en un comunicado emitido la mañana del miércoles. "Ella era la estrella más glamorosa y sexual de nuestra generación", dijo Reynolds, de 78 años, en el mensaje. "Nadie más podría igualar la belleza y sexualidad de Elizabeth. Le gustaba a las mujeres y los hombres la adoraban ella, y su amor por sus hijos es permanente".
Reynolds agregó: "Ella era un símbolo de la fama Su legado va a durar."
A pesar de que eran amigas en el momento de la muerte de Taylor, durante los finales de los años 50, Reynolds y Taylor estuvieron inmersas en el mayor escándalo sexual de la década.
Reynolds, protagonista de “Singin’ in the rain” (Cantando bajo la lluvia) y otros musicales de la MGM, fue la novia de Estados Unidos y madre de dos hijos con su esposo, el joven cantante Eddie Fisher - que en 1957 le fue robado por la entonces recientemente viuda Liz Taylor.
Fuente:rpp.com.pe



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